La Empresa Nacional de Minería (ENAMI) se presentó ante la Corte de Apelaciones de Copiapó para defender su decisión de paralizar temporalmente la Fundición Hernán Videla Lira. Esta medida, argumentada ante la justicia, se basó en un análisis detallado de las cifras financieras y operacionales de la fundición. Se reveló que la empresa enfrentaba una situación financiera compleja, agravada por pérdidas operacionales significativas y el vencimiento de deudas a corto plazo.
Según el documento presentado por ENAMI, la decisión de paralización se fundamentó en proyecciones financieras que indicaban un déficit económico considerable en caso de continuar con la operación de la fundición. Se detalló que la empresa perdía aproximadamente US$ 250 por cada tonelada de concentrado procesado, lo que generaría un déficit de flujo de caja de alrededor de US$ 55 millones para el año 2024, además de otros US$ 40,5 millones por bajo rendimiento de la fundición.
El directorio de ENAMI tomó en consideración estos datos al decidir por unanimidad adelantar la paralización temporal, considerándola como una medida racional y necesaria para salvaguardar los intereses financieros de la empresa. Además, se revelaron iniciativas en curso para hacer frente a la deuda acumulada, incluyendo planes de venta de inventarios y contratos de maquila, que se espera generen ingresos significativos para aliviar la situación financiera de ENAMI.
Esta declaración proporciona un contexto detallado sobre los motivos detrás de la decisión de ENAMI, destacando la importancia de considerar tanto los aspectos financieros como operacionales al enfrentar desafíos económicos significativos. La empresa busca asegurar su estabilidad financiera a través de medidas prudentes y proactivas, en medio de un entorno económico desafiante.